Crónica Fotográfica (343): Al sol

Crónica Fotográfica (342): Ruinas románicas en el Retiro

Crónica Fotográfica (341): Cae la noche en nuestro jardín

Crónica Fotográfica (340): El ahuehuete para Asun

Crónica Fotográfica (339): Días de agua y flores

Crónica Fotográfica (338): Feliz Sant Jordi

Hoy no podía dejar pasar la ocasión de publicar la foto de una rosa roja. Sant Jordi es un día especial para mí por muchas razones, y quiero aprovechar esta ventana para felicitar a todas las personas que tienen motivos para celebrar este día, también a los amantes de los libros y, muy especialmente, a mi hermana. Para ti, Charo, la rosa más hermosa, roja, por supuesto.
Un abrazo a todos.

Crónica Fotográfica (337): Rosa rosa

Crónica Fotográfica (336): Lisa, Lisita, Lizzie, Lisístrata

Crónica Fotográfica (335): Dos puertas

Crónica Fotográfica (334): Un castaño para Elena

Queridos amigos, visitantes, comentaristas, huéspedes y seguidores:
Como ya sabéis, falta poco para que ponga punto final a mi Crónica Fotográfica, y me gustaría agradeceros de algún modo vuestra compañía durante todo este tiempo. Andaba yo dándole vueltas a la idea de que sería divertido que vosotros me pidierais qué fotografiar cuando Elena llegó con su solicitud y consiguió darme el empujón que necesitaba.
Desde este momento y hasta la fotografía 365, estáis todos invitados a participar en la Crónica. Sólo tenéis que decirme qué queréis que fotografíe, y por mi parte haré todo lo posible por hacer realidad ese deseo. Ya sabéis que el parque del Retiro es mi campo de acción, pero, por lo demás, podéis pedirme lo que os apetezca: plantas, animales, personas, cosas... Venga, ¿quién se anima? ¡Esto puede ser muy divertido!
Gracias, Elena.

Crónica Fotográfica (333): Tres amigos

Crónica Fotográfica (332): Morera de papel

Crónica Fotográfica (331): Lisa y su fotógrafo

Crónica Fotográfica (330): Una de esas miradas

Crónica Fotográfica (329): El mejor vehículo

Crónica Fotográfica (328): Uno de esos momentos

Crónica Fotográfica (327): Mirando

Queridos amigos: os pido perdón por la ausencia. Últimamente me siento desfallecer. Me flaquean las fuerzas, ahora que ya me queda poco para completar mi proyecto Crónica Fotográfica. Tengo la sensación de que me repito, de que no consigo arrastraros para que miréis por esta ventana. Hoy, sin embargo, estoy de nuevo dispuesta a continuar. Gracias a todos.

Crónica Fotográfica (326): El embarcadero, ayer